jueves, 7 de mayo de 2009

Contingencia

Te sé buscar en los lugares más recónditos de mi interior. Entre tanta oscuridad, tanta tiniebla, o duda, incertidumbre, negación. Tú, la certeza mas cierta, la verdad más verdadera, el momento más real, te escondes. Y no es que no sepa tu morada, sino que muchas veces no tengo interés en buscarte. Y no es que no sepa tu secreto, aunque esperes mi llegada para poderlo develar. Es que esta tentación, esta lujuria, este mundo que hoy me llama, es tan fácil de seguir y tan difícil de desenmascarar. Esta tierra de la perdición, del pecado, del yo, me incitan. Me impulsan inevitablemente a perderme un poco más en todo ese instinto.

Y de vez en cuando alguna de tus tantas verdades se inmiscuye entre toda esta imperfección, y sin quererlo la veo, la reconozco e intento ignorarla. Pero ya no hay nada más que hacer, la culpa llegó, y tropiezo. Y mil dedos señalan, me humillo. Ese universo que por momentos había sido el más entretenido y bacanal, hoy se convertía en la nada más ausente, en un gran vacío obscuro, sediento de conciencias inconscientes como la mía.

Y ya no recuerdo mi secreto más grande: dónde estabas y qué escondías. Ya reprimí, entre tantas cosas importantes, eso que mantenía en línea mi existencia, ese imponderable. Mis ojos que después de tanto estar cerrados, con este destello de tiempo y espacio se volvían a abrir, se encandilaban con tanta luz. Y haciendo el mayor esfuerzo por abrirse un poco más y ver, en esa dolorosa ceguera, una imagen tan suave como la seda, tan dulce como la miel, se revelaba.

Y allí recordaba una vez más, eso que me enseñaste y había prometido no olvidar. Eso que una vez más, después de tanta suma, milagrosamente se repetía haciendo una excepción. Sólo quien tiene verdadera sed busca y encuentra. Sólo aquel que en su desesperación ruega por el encuentro sin resignarse, logra tomar esa verdad con las manos y darle forma de realidad, de momento, agudiza todos sus sentidos y en el segundo más fugaz, se siente a salvo en la contingencia por primera vez.

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